1ª ....confundido...

Publicado por Letras Humanistas | 23:01 | 1 comentarios »



…escuché unos tacones altos alejarse lentamente…

poco a poco abrí mis ojos
se veía todo borroso

miro mi reloj marcaba la 4 menos 12
pero el segundero no avanzaba

no muy lejos de mi una botella de ron a medio vaciar
y un dolor taladrante en mi cabeza
a mi camisa le faltaban dos botones
y mi corbata…
mi corbata ya no estaba
torpemente reviso mis bolsillos aun en el piso
un par de monedas,
mi teléfono celular muerto,
y una servilleta cuidadosamente doblada
en ella tenia escrita una dirección y un beso marcado en inquietante labial azul

mientras intento recobrar la conciencia miro a mi alrededor…

calles oscuras
húmedas
frías…
de ladrillos viejos
silenciosas como iglesias
luces esféricas
como pequeñas lunas
el cielo… lo que veía no era cielo
se parecía más al fracaso de dios
por fin me levanté
tomé la botella de ron
y caminé afirmándome de las paredes


(continuará)

Arcana

Publicado por Letras Humanistas | 0:14 | 0 comentarios »


Era una calle larga y angosta. La intensa neblina hacía que el frío corriera en la sangre de mis venas. Las flores del parque adornaban el triste escenario de aquél oscuro y sombrío invierno.

A lo lejos se escuchó el estremecedor sonido de un caballo y al instante di vuelta: vi al Jinete Negro con su honorable corcel blanco, supuse otra vez que venía a buscar su doncella a la gran casa que se encontraba frente al parque. Allí se detuvo y se bajó de su Corcel a tocar la puerta de tan afortunada mujer, a la que otra vez llevaría a conocer las maravillas del inframundo donde todos los días y a la misma hora me imaginaba ese fantasma que me atormentaba.


Berenice Miranda

El amor y el odio

Publicado por Letras Humanistas | 0:09 | 0 comentarios »

“(…), harto de decir tantas tonterías
De intentar olvidar ese tiempo pasado,
Minutos diciendo lo que no debía
Luego arrepentido si analizo lo que hablamos.
Dejo llevar mi mano pa` calmar el alma mía,
Escribo unas líneas recordando tu calor
Porque si la soledad no existiera en esta vida
Tu compañía no tendría valor. ”
Ningún valor; Skalariak – SKALARIAK; Madrid, España.

¿Es posible definir “amor” u “odio” como una palabra más en el diccionario, de una forma objetiva?

Para muchos es muy difícil definir “amor” pues no sólo implica una emoción sino también el recuerdo de personas con las cuales alguna vez “convivimos” o con las que estamos ahora; el recuerdo melancólico de lugares de olores, de sabores, de voces, de canciones, miradas y de palabras alojadas en el corazón que nos hacen suspirar o reír.

Como no recordar anécdotas en nuestra mente; como la imagen o la sensación de estar viendo una película y tan solo aquello nos hace sonreír en la calle como si estuviéramos locos o alegrarnos simplemente el día –por lo menos a mi si-; como olvidar lo que sentíamos o nos hacían sentir las personas que daban “sabor” a nuestra vida, que nos hacían sentirnos realmente vivos en esta vida muerta y rutinaria, por así decirlo.
Pero como no querer olvidar todos aquellos lugares que nos cambiaron la vida para peor, en donde tal vez conocimos a aquel, aquella o aquellos que nos hicieron tanto daño y que lo recordamos como si fuera una película al igual que la anterior, pero esta vez es de terror; como no querer olvidar todas esas palabras que nos hicieron tanto daño y que nos marcaron como los ganados son marcados, reconocidos y llamados por palabras denigrantes como “el(la) estupido(a)”, “el(la) imbecil(a)”, “el(la) idiota”, “el(la) tonto(a)”, “el(la) inútil” y cuantos otros más.

Como no querer olvidar el desprecio de la gente, las desilusiones amorosas, las traiciones de aquellos que amábamos o aun amamos; como no querer olvidar a quien nos maltrató y nos desechó, pues nos estimó como una langosta, algo insignificante que tiene valor.

Pero al final de todo, felizmente –creo-, el hecho de haber experimentado ambas emociones nos hace capaz de distinguir entre los buenos y los malos momentos, y así el poder disfrutar cuando estamos viviendo un momento bueno a plenitud, además de recordar siempre que después de un momento malo viene uno bueno. Sólo hay que aguantar y ser fuerte, pues es en esos “desiertos” en donde aprendemos y crecemos como personas, es en aquellos tiempos en los cuales realmente valoramos a las personas que tenemos a nuestro lado y lo que hemos conseguido en nuestra vida, es en estos momentos donde muchos buscan a Dios y le hallan, clamando de corazón sin ponerle condiciones a lo que El hace, y quien sabe que otras cosas más suceden pero solo te vuelvo a recordar esfuérzate, se valiente, no temas ni desmayes, haz siempre lo correcto, lo justo y lo verdadero, que tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.

Shalom.

SHEKINAH
(Bryan Concha Zagaglioni)

Hagamos un trato

Publicado por Letras Humanistas | 21:43 | 4 comentarios »


Cuando sientas tu herida sangrar
cuando sientas tu voz sollozar
cuenta conmigo.

(de una canción de Carlos Puebla)

Compañera,
usted sabe
que puede contar conmigo,
no hasta dos ni hasta diez
sino contar conmigo.

Si algunas veces
advierte
que la miro a los ojos,
y una veta de amor
reconoce en los míos,
no alerte sus fusiles
ni piense que deliro;
a pesar de la veta,
o tal vez porque existe,
usted puede contar
conmigo.

Si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo,
no piense que es flojera
igual puede contar conmigo.

Pero hagamos un trato:
yo quisiera contar con usted,
es tan lindo
saber que usted existe,
uno se siente vivo;
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos,
aunque sea hasta cinco.

No ya para que acuda
presurosa en mi auxilio,
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.

Un pequeño reconocimiento de este espacio al gran escritor Mario Benedetti que hoy ha dejado de existir.... Nos quedaremos en la tierra con sus grandes escritos. Por suerte...

Hoy en la tarde

Publicado por Letras Humanistas | 0:55 | 3 comentarios »


Hoy en la tarde, antes de ponerme a dormir, vi un trozo de película que pensé que era un corto, pero después me di cuenta de que debió haber sido más larga que eso, porque salían hartos actores en los créditos. El asunto es que la parte que alcancé a ver –y que fue suficiente para mí-, mostraba a un pequeño niño como de 10 años, que entraba a un café que tenía pastelería y heladería. Entonces, la cámara, que al comienzo eran los ojos del niño, da la vuelta alrededor de una mesa hasta sentarse en la silla y mirar un menú que estaba sobre la mesa.

Por otro lado, estaba la cara abúlica de una pobre mesera, que se acerca a la mesa, le quita la carta de las manos al niño y le pregunta: ¿Qué querí? Sus ojos denotaban al pobre funcionario que odia su trabajo porque su infinita mala suerte le condena a estar allí.

El niño le pregunta entonces, cuánto vale un helado de chocolate, con crema y con una cosita roja encima. La mesera, con burla y rabia contenida, porque para ella, estaba perdiendo su tiempo, le dice hoscamente: ochocientos. El niño extrae de su bolsillo un montón de monedas, las empieza a contar lentamente con su dedo y según una pequeña conclusión, le pregunta nuevamente cuanto costaba el helado, pero sin la crema. La mujer le contesta -por supuesto oscura-: Seiscientos. El chico repite el procedimiento, cuenta sus monedas y le indica a la mesera que le traiga uno de esos. Durante toda esta escena, la dueña miraba desde su puesto tras la caja, también con desagrado.

La chica va y prepara, hasta que aparece en la mesa con una copa de helado de chocolate, con la cosita roja encima, pero sin la crema. El niño abre los ojos desorbitados, impresionados por lo que le traían.

Pasado un rato, el niño ha tomado su helado, y mira contento alrededor, contento de gusto. La mesera, que lo miraba ponzoñosa, se acerca y le dice: Son seiscientos, de modo que el niño saca las monedas y cancela. Ella recibe el importe, retira algunas cosas de las mesas vecinas y vuelve al mostrador. La dueña-cajera, le entrega las boletas respectivas para cada mesa, indicando que una es para la mesa 5 y la otra para el niño. Cuando se acerca a entregarlas, nota que el niño ya se ha ido, pero que en su mesa, había el equivalente a dos monedas grandes, que él había dejado para ella.

Estupefacta, la chica queda clavada frente a la mesa, buscando con la vista al pequeño niño.



(Hay personas que le huyen al llorar. Pero, realmente es este mundo un espectáculo que emociona continuamente y mueve a las lágrimas.)

Marco Antonio

Carta para pensar

Publicado por Letras Humanistas | 0:42 | 4 comentarios »



El amor, todo lo que nos rodea
la pruebas que nos pone la vida,
tristeza, angustia o conformidad,
por lo que cada persona lucha,
el amor por si mismo, el querer
ser mejor, no por ganarle a
alguien sino por superarse...

El amor, aquellas cosas que nos
hacen madurar, el nacimiento de
un hijo, la falta de un ser querido,
o bien una desilusión amorosa.

Uno no madura solo con éxitos,
cada tropiezo, cada fracaso.
Todo aquello que nos obliga a
levantarnos, que nos dice:
compadre tu puedes,
no te eches a morir.

La vida esta llena de obstáculos
y dudas, que tienes que saber
resolver y entender, no se es
mejor solo superándose,
tú no estás solo eres uno más
de este mundo, hay que
aprender a convivir con los
demás, aprender a ayudar y a recibir
ayuda, siempre habrá alguien
mejor que tu, siempre habrá alguien
que te admire, cada persona es
única con sus diferentes cualidades
y defectos, todos somos diferentes,
pero parecidos a la vez, jamás
buscarás ayuda, esa ayuda
te encontrará.... el amor
mueve a las personas y eso no
se puede negar.

Jamás harás algo pensando solo
en ti, jamás dejarás que tu cabeza
reniegue a tu corazón, ni que tu
corazón le de ordenes a tu cabeza.
Es trabajo mutuo que sin darte
cuenta siempre está presente.
Tu cabeza piensa según tus
sentimientos, y tu corazón ama
por razones y recuerdos.....

Todo se mueve así. Tú no
piensas en amar a la gente,
pero tu ama pensar en ellos,
recordarlos con amor.

El amor lo es todo.

Es el quien dirige tu vida en este
camino, lo que te hace tomar
decisiones y sentirte bien con ello....
el amor es, fue y será aquello por lo
que darás un si o un no.
el amor nos domina
con un punto final.

Gabriel Zamorano

Diablere

Publicado por Letras Humanistas | 0:44 | 2 comentarios »


Consume
Consuma
El hecho
Un producto
Del deseo

Sigue
Cortando
Cortándome

Bebe del seno de la vid
Emborráchate
Sacia
Cierra tu boca a la fuerza
Muérdeme
No fingiré

La sangre no es subjetiva

Andrés Gavilán

Mis sueños

Publicado por Letras Humanistas | 0:39 | 1 comentarios »


Mis sueños lejanos se han trasformado en grandes construcciones que, como si tuvieran vida propia, han cambiado de forma, se han angostado, en algunas partes, como un camino que al estar en reparación tiene una sola vía…adelante…solo adelante, impidiéndome cambiarlos porque me han atrapado y encarcelado en sus redes de sueños jóvenes e inexpertos..

Otros sueños se han engrosado de tan nutridos asemejándose a rechonchos bebés que vomitan leche de tan satisfechos… son libres como el viento en septiembre, elevan ideas a mi mente como si fueran volantines surfeantes en el mar de mis emociones y se transforman como si tuvieran vida propia dándome lecciones de idealismo, elevándome sobre la tierra y mostrándome belleza, gozo, dándome la oportunidad de disfrutar esa felicidad escasa y tranquila que brindan los años de trabajos y de debilidades.

He acudido al continuo funeral de otros sueños que dejaron de existir conforme los días se sucedían…como si agonizaran de un cáncer que carcomió sus pequeñas y débiles entrañas, dejando en mí, con cada quejido de su muerte, una fuente de recuerdos, ya que cuando los años entraron en mis cabellos y algunos sueños traicioneramente me abandonaron, el dolor se encargó de escribirlos con grana en mi corazón. El dolor de la pérdida de ese sueño se encarga de mantenerlo abrigado, tapado por una frazada construida con hilos de temor, en una cama de patas que se alimentan del conocimiento esquivo de saberlos perdidos. Ahí están… guardados para recordarme que existieron, que los soñé, que los tuve…pero que ya no están.

Hay sueños coquetos que me cierran un ojo y luego se alejan de mí, y luego vuelven a bailar conmigo y luego nuevamente continúan su viaje…abandonándome llena de risas y esperanzas, como si volviera a los 15 años…estos sueños son los mejores cuando la adultez me cierra los ojos y parece que me robara el alma…estos sueños coquetos llenan mi corazón gitano de emociones y sentimientos jóvenes.

Los sueños que más amo son aquellos que se han formado de a poquito en mi vientre, son sueños que crecen y se dan a luz pocas veces en la vida, yo solo he tenido dos, y como han estado dentro mío, anidando en mi útero y comiendo mi calcio, se parecen a mi esencia…los veo diariamente formar su propia red de sueños, fortaleciendo sus cuerpos y mentes con sueños gigantes que meten sus raíces en la tierra negra de la niñez … estos sueños los atesoro en mi espíritu y los visto con sedas de amor, los protejo de otros sueños que a veces, envidiosos, los tratan de relegar, los cubro del frío del olvido con carbones rojos de maternidad y los calzo con paz para que su andar sea calmo y se fortalezcan con agua de ternura y que finalmente me regalen un poco de sus sueños subordinados…sé que estos sueños me darán sueños pequeños que ya amo porque también llevarán mi esencia.



Ursula Sáez

Circo sin animales

Publicado por Letras Humanistas | 20:28 | 1 comentarios »


Cada día hay más y más personas que apoyan esta causa, como cada vez hay más personas sin sentimientos que pueden cometer este acto de maltrato. Poco a poco las personas se han dado cuenta, sobre las condiciones en las que viven los animales de circo, ya que en comparación con los animales libres están en un total decaimiento; y como todos saben este no es el único problema que traen este tipo de circos, sino que también, ya tienen la "mala Fama" de que cuando llegan a un lugar comienzan a desaparecer mascotas y perros callejeros, como es posible tanta crueldad, aparte de tener mal cuidados a estos pobres animales los alimentan maltratando a más animales, como lo son las mascotas, ya que, para los que tienen mascotas, las cuidan y las valoran, son un integrante más de la familia, al cual hay que entregarle cuidados, alimentos y sobre todo cariño, ya que los animales también sienten.

Un caso así que se publicó hace unas semanas atrás, es el de una familia que perdió a su perrito, y para pasar las penas decidieron ir al circo, donde no pasaron esta tristeza sino que aumentó, al darse cuenta de que el pelaje de su perro estaba dentro de la jaula de los leones. Dicen que lo que nos diferencia de los animales es la capacidad de razonar que tenemos, pero, ¿en qué se razona al momento de cometer tal atrocidad?...

Por eso, me gustaría que muchas más personas tomaran conciencia del sufrimiento de estos animales y no asistieran a este tipo de actos, algo tan bonito como es el circo, ensuciado por el maltrato y sufrimiento de los animales, se debería tomar justicia en estos casos y prohibir los permisos a circos con animales.


Marcelo Torres Hermosilla.

¿Cómo puedo publicar un texto en el blog?

Publicado por Letras Humanistas | 22:51 | 3 comentarios »

Es muuuuuy sencillo queridos tertulianos. Con tan sólo un par de pasos que debes seguir atentamente... Tomen nota:

1. Ingrese a su página de correo electrónico preferido
2. Escriba su nombre de usuario y su contraseña
3. Una vez que ya esté en su cuenta, haga click presionando el botón derecho de su ratón donde dice "enviar correo"
4. Escriba la dirección de correo a la cual desea enviar su texto
5. vida.humanista@hotmail.com
6. Adjunte su maravillosa creación
7. Luego, con el mismo botón derecho de su ratón haga click en enviar
8. Y listo

De la publicación nos encargamos nosotros

y ya está

Fácil ¿No creen?

El circo de pulgas

Publicado por Letras Humanistas | 2:27 | 0 comentarios »


Podía pasar largas tardes y noches mirando. Me gustaba mirar las pulgas trapecistas, era inconfundible el momento de iniciar su rutina; iba y venía el vaivén en el trapecio. Mi atención también se la llevaban las pulgas domadoras. Era impresionante ver a la pulga domadora como hacia bailar al ritmo del rock de la cárcel a la pulga elefante, con su trompa larga colgándole hasta el suelo; era una pulga elefante gorda, la más gorda de todas las pulgas. Sin embargo, la rutina que más, pero que más me gustaba era la de la pulga bala. El anunciador le daba más expectación al show – Y a continuación, directamente desde Praga y recorriendo más de veinte latitudes con este espectacular show de vida o muerte, dejo con ustedes a Marinel, la pulga bala- Y ahí salía ella, con una maya azul, cubierta de un abrigo repleto de lentejuelas y plumas, con su cara pintada de blanco, botas rojas y unas pestañas crespas, las pestañas más crespas que he visto en una pulga. Los aplausos, las rechiflas y los gritos de la gente me ensordecían. Los niños saltaban y se arrimaban al lomo de sus padres para ver mejor. La expectación era descomunal, no había tiempo para pestañar. Yo trataba de evitarlo, pero tenía que forzar al máximo mi vista para ver semejante espectáculo.

El circo estaba situado en un rinconcito de mi velador. Las funciones eran a las 21:00 horas, justo en el momento en que me iba a acostar. Me había convertido en un fanático de este circo, era cuestión de todas las noches que me acostará y me asomara por una pequeña rendija de la carpa. Cada vez que asistía ver las funciones del circo de pulgas el mundo dejaba de existir. No había nada más importante, maravilloso e ilusorio que ir al circo de pulgas.

Una noche, no recuerdo el motivo, llegué tarde a la función que empezaba a las nueve. Pero por suerte, alcancé a llegar justo al momento de la rutina de la pulga bala. Ya la habían presentado y ella ya se estaba metiendo al gigantesco cañón, así es que me acomodé y miré – ya esta todo listo para el lanzamiento- dijo el anunciador- enciendan la mecha- 3, 2, 1, boooooom. La bala pulga voló por los aires, tanto así que rompió la carpa y salió disparada hacia el exterior de ella y yo la ví en ese momento. Voló y voló para terminar muy mal herida encima de mi cama. Cuando la fui a socorrer, la pulga bala estaba muerta. Miré adentro del circo y la conmoción era de grandes magnitudes. La función se suspendió. Intenté decirles que la pulga bala estaba acá afuera. Gritaba y gritaba pero nadie de las pulgas me escuchaba. Me fui al baño preocupado, a mojarme un poco la cara para despejarme un poco de la gran tragedia que había visto. Cuando volví, afuera del circo había un gran cartel que decía: “Se suspenden las funciones de esta semana por duelo”.

Sólo me quedó lamentar lo sucedido y me quedé dormido. Desperté a las cinco de la madrugada y el maravilloso y espectacular circo de pulgas que había recorrido la mitad del planeta con su show ya no estaba. Había fallecido Marinel, la mujer que había presentado su rutina en más de veinte latitudes. Era el show que más me gustaba.

Los sueños ya nunca fueron los mismos.

Gonzalo Campos Márquez

Junto al Manzano

Publicado por Letras Humanistas | 2:20 | 0 comentarios »


De niño mis padres solían traerme aquí para recoger manzanas, pero hoy todo ha cambiado… es como si pudiera imaginarlos a mi lado, siento su presencia junto a mi, pero solo me basta con una mirada a mi alrededor para saber que no es así, que ya no están, que solo sus tumbas quedan. Siempre estuve cerca de la muerte, he perdido a mis abuelos, a mi tío y los únicos primos que tenía. Mi mejor amigo perdió a sus padres a los tres años, pero a él no le cambio la vida, para él sus padres son sus tíos, pues ellos los criaron, no conoció más, nunca tubo más…se crío bajo la casa de sus tíos, no bajo la de sus padres. Para mi es diferente, tengo 17 años, viví toda mi vida con mis padres, ellos me enseñaron todo lo que sé, compartí con ellos toda mi niñez, crecí, aprendí, soñé, y ya no están, me gustaría saber que pasará conmigo…no tengo más familia, seguro me iré a un orfanato hasta cumplir los 18, no hay otra opción… ¡Como cambia todo de un segundo a otro! Como es que ayer, estábamos los tres mirando el atardecer como cualquier día, aquí mismo, junto a este gran árbol, y hoy, me encuentro solo, y no se que va a ser de mi.

Siempre las personas a mi edad, creo yo, piensan en la adolescencia, en la juventud, como un tiempo para ser uno mismo, sin responsabilidades, sin cargas, la sola preocupación de uno mismo, e incluso esa preocupación es vana, pues la mayoría de la juventud piensa que el cuidado de uno mismo es estar bien físicamente, el cuidado, para los jóvenes de hoy, no significa, preparar el futuro, no significa poner una base de valores, creencias, definir nuestra filosofía… por mucho tiempo yo pensé así…pero ¡Oh, cuanto me arrepiento! Quizás si yo hubiera escuchado mejor a mis padres, quizás si yo me hubiera esforzado más en mis estudios, si yo hubiera pensado, reflexionado sobre mi futuro, sobre lo que Yo pienso y siento, quizás ahora sabría como enfrentarme a la vida.

Una vez leí en algún lado una frase “ser joven no es ser dependiente de otras personas, si no aprender a valerse por si mismo” y pensé al leerlo que eso era una tontería, pues cuando sea adulto, me valdría por mi mismo, no ahora, ahora necesito tiempo para mi, tiempo para definir mis gustos, hasta quizás lo que quiero estudiar, pero nada más.

Hoy 13 de febrero del 2007, me doy cuanta de que todo lo que un día pensé, toda mi filosofía no voluntaria, era mentira, un pensamiento vano y superficial, lo peor de todo, es que si ayer no hubieran muerto mis padres, hoy seguiría con la misma filosofía, y solo por ello abro los ojos. Las circunstancias de la vida me han arrastrado hasta este punto, no fue algo lento, no fue un proceso, como la arena, que un día fueron rocas, pero luego de cientos de años, gracias a la erosión de las olas contra ellas, crean una playa, y aunque las rocas tuvieron que estar bajo la erosión del agua por tanto tiempo, al fin formaron algo hermoso, algo que valió la pena; pero en mi caso, yo no puedo, no tengo ese testimonio, fue algo así como un huracán, llega sin aviso, y destruye todo a su paso, y luego, cuando el huracán se ha ido, recién ahí, uno puede reconstruir, todo de nuevo, lo que tarda años de sacrificio, trabajando en poner bases más sólidas, para que si otro huracán viene, no pueda destruir todo a su paso.

Así que hoy me doy cuenta, recién hoy dejo de ser un niño por completo, y me comienzo a preparar para la vida, siendo que este pensar, este sentir, lo debí tener desde el primer día que comencé a ser adolescente, desde el primer momento en el que me encontré acercándome a la adultez, cuando oí esa frase, la cual ignore, pero era tan cierta, de todas formas supongo que no hubiera podido cambiar esa filosofía, a lo mejor no era el momento, de cierto sé que no tenía la madurez en ese entonces, y no se si la tengo ahora, pero tampoco me lo pregunto, pues no creo que un hombre maduro de 40 años, se pregunte si es maduro, solo lo siente, lo sabe, y por ello no es necesario decirlo, ni siquiera recordarlo de vez en cuando en algún pensamiento ególatra, pues lo sabe, y creo que mi meta es llegar a ese punto, pero tendré que pasar por mucho primero, pues debo reconstruir todo lo que el huracán destruyó con su paso, y esta vez, con un base sólida, y eso me tomará mucho tiempo.

Este lugar siempre ha sido especial para mí, el monte del manzano…de pequeño, como ya dije, mis padres me traían a sacar manzanas, y hoy se encuentran, junto a sus raíces…mis padres, y con ellos, aquí, transcurrió mi vida, y aquí nuevamente, hago un cambio, paso a otra etapa, y junto al amanecer, junto al comienzo de otro día, puedo ver el comienzo de otra etapa en mi vida, mi renacer, no lógico, no literal, si no del pensar, del saber, del sentir, hoy soy conciente de que tengo una filosofía propia, pero esta vez, la correcta, pero veo todo esto, reflexiono junto al manzano, pero lleno de amargura de todo lo que perdí, a veces cuando pierdes ganas, y a veces cuando ganas, pierdes, ¿Y ahora cómo saber si perdí o gané? …

Rebeca Cepeda

Celofán

Publicado por Letras Humanistas | 1:57 | 3 comentarios »

Llegué sin la más mínima idea,
creyendo que nadie es nada
ni yo misma.
Quise hallarte entre suplicas
pero siempre algo te cubrió.

Ahora dispersa entre mi mundo
comprendo la irrealidad de la sumisión.
Uno no es ninguno
y todo no siempre es todo

Acabó: siempre supe que no debí decir nunca.

Laura Encalada

Hoy soñé los sentimientos de Sofía

Publicado por Letras Humanistas | 1:49 | 3 comentarios »

Soy Sofía, siento algo extraño en mi madre y es que aquí sus sentimientos son los míos. En estos momentos no sé lo que le sucede a mamá pero sentimos, mucha pena y aun no se por qué. Papá le gritó hoy en la mañana y desde ese momento mama está mal, ahí empezó todo, siento algo que me presiona el pecho no se qué es… sólo sé que no se siente bien.

Siempre escucho la voz de mi madre, ansió verla, debe ser hermosa, su voz lo es. Imagino que saldré de aquí y me abrazara, lloraré cuando me haga falta y como se que vendrá a mi salvamento reiré cuando este triste.

Mamá está peor que antes, se siente mal muy mal, ¡no quiero que nos sintamos así! Veo claridad, acaso... ¿Saldré de aquí? Quiero sentirme feliz, pero no puedo, tanto espere este día, pero no me siento bien… algo se acerca a mi, me alejo de el, me da miedo. Me sigue y yo ya no puedo huir más, mi espacio es reducido aquí, atrapo una de mis piernas ¡me duele! Nunca antes había sentido esto, agarra cada vez más fuerte ¡mamá! Diles que paren ¡por favor! siento como la desgarran de mi, la cosa extraña sale y yo apenas soporto el dolor, grito y lloro por mi dolor pero no soy escuchada. Entra de nuevo ¡mamá, mamá! ¡Sácalos diles que paren! , no entiendo como mamá deja que esto pase, ¿es que no quiere jugar conmigo?... Ya no siento dolor, si no me quería ¿Por qué aparecí en ella? ¿Por qué me hizo pasar por esto? Siento pena que me odie tanto, pero siento más pena porque en mi último latido sentí su arrepentimiento…



Francia Varela